Hola que tal. Supongo que si estás leyendo este post es porque estás planificando venir a pasar una temporada a Barna. Quizá estás cumpliendo un sueño largamente meditado, o quizá es una resolución obligada por trabajo, que has debido aceptar resignadamente. O aun tal vez has comprado este post por el hecho de que quieres conocer algo más sobre esta maravillosa urbe ya antes de tomar una decisión que llevas tiempo reflexionando. ¿Debo elegir Barna para irme a estudiar, para emprender una nueva etapa en mi vida? ¿Debería optar mejor por la capital de España, Salamanca, otro lugar..? Hay posturas eróticas que precisan de una cierta preparación antes de efectuar la penetración. Estas posturas pueden parecer difíciles o aparatosas. Solamente lejos de la realidad. Una vez superada esa complejidad inicial, una vez conseguida esa pequeña dosis de coordinación precisa para conseguir que la penetración tenga lugar, esas posturas eróticas se transforman en una fuente inagotable de placer.

Al tener más confianza en ti mismo, dejas de ver a las mujeres como unas el blogas griegas; dejas de sobrestimarlas y comienzas a mirarlas como lo que son: seres de carne y hueso como tú, y con los mismos defectos y virtudes que tú puedas tener. Hasta cierto punto, el desarrollo de la especialización profesional durante el siglo XIX sustituyó las desmoronadas barreras que imponían las diferencias de sexo y clase social. En la medida en que los estudios sobre prostitución solamente aparecieran en publicaciones médicas, en tanto que la degeneración de los romanos se enseñara en tomos que sólo los anticuarios con medios de fortuna podían comprar, los privilegios de los caballeros continuarían sanos. Pero es característico de los primeros pornógrafos que, aunque se escudasen a sí mismos tras estas barreras, se esforzaron al mismo tiempo por romperlas. El lamento de Acton por ese RECONOCIMIENTO, que ponía en estridentes mayúsculas, es una prueba de ello: Acton escribió como médico, pero su campaña solo podía tener éxito si recibía el apoyo de una audiencia más vasta que la comunidad médica. En consecuencia, como escribía un comentarista de La prostitución, Acton corría el riesgo de instigar el mal que mismo se planteaba conjurar:Aunque se le pueda pedir a un estudioso científico que especifique los resultados de su experiencia, y aunque el littérateur pueda hallar un sentido en ciertas representaciones fotográficas de la más baja corrupción y también inmundicia, y aunque todo esto pueda inspirar a los virtuosos a emplearse a fondo en la superación del vicio, sin embargo, para el joven, el sensual, el vicioso y el inexperto, estos posts científicos así popularizados pueden transformarse en simples guías del vicio, o proveer entretenimiento a la salaz fantasía del depravado; y en esta forma, compiten con el mismo mal que reprueban sencillamente por sugerir medios y recursos al desenfreno y al vicio que de otra forma jamás se habrían imaginado […] [47].Es el mismo espectro que perseguía a los autores de catálogos y guías de Pompeya: la mejor manera de cerciorarse de que estos posts no hiciesen ningún daño habría sido no escribirlos, una alternativa que nunca se plantean quienes estudian otros temas, mas que los primeros pornógrafos invocaban con grave persistencia, lo cual hacía ineludible el preguntarles, ¿por qué, después de todo, se ha decidido usted a redactar sobre ello?

Si no estás listo para casarte díselo

Semeja que siempre y en toda circunstancia voy a estar ahí, que no importa lo que haga. Nada va a ser suficientemente doloroso como para hacerme dejarle. Por el hecho de que cada vez que le dejo, regreso. Jamás voy a apartarme de su lado. Y si me aparto, volveré. No tocar es exactamente lo que hacemos con el sexo, a fuerza de engañarnos pensando que no paramos de tocarlo. Leí un día que Hegel, en su lecho de muerte, pronunció, recordando a su esposa, las siguientes palabras: Nadie me ha entendido, salvo quizá Marie… y no fue a mí a quien entendió. El elitismo de las orgías VIP organizadas por Killing Kittens no se deriva solo del estatus social de los participantes en exactamente las mismas. También se deriva del entorno en que dichas orgías se festejan. En su página web Killing Kittens lo explica de una manera sumamente gráfica: un ático neoyorkino o bien un yate en Saint Tropez pueden convertirse en el espacio físico que acoja una orgía VIP. La mayor parte de las personas tienen un poco de sadismo y masoquismo adentro, Mas Ichi es 100 por ciento puro sadismo. Parece mentira, pero son muchas las parejas que se inician en el bondage con las eternas (y muy fetish, todo hay que decirlo) esposas metálicas… Y esto acostumbra a conducir a resultados desastrosos.

¿Cómo debe ser el procedimiento del examen genital femenino?

Teniendo así las cartas en nuestra mano, le pediremos al espectador que corte por donde quiera. Cuando el espectador esté empezando a recortar, la simple presión de nuestros dedos contra las cartas (no hace falta apretar más de lo normal), la separación creada por el meñique y el hecho de que el propio meñique sostenga la carta a forzar eludiendo con lo que se pueda levantar alguna carta de más, harán inevitablemente el espectador corte justo por donde tenemos la carta a forzar. Si además de esto retiramos un poco la mano hacia abajo cuando el espectador ya tiene cogido su montón, podremos ayudarle a coger justo las que queremos. Sencillamente no te precipites al separar su montón. Acompaña su cadencia natural y solo levanta un tanto el meñique cuando tu espectador ya haya empezado a coger las cartas. Practícalo, hazlo con confianza y vas a ver que sale siempre. De todas y cada una maneras, y si no sale ¿qué? Puesto que no pasa nada. Si procuras forzar una carta y te sale mal el forzaje, simplemente haz otro juego en el que no precises forzar una carta para nada. Para tu público nada habrá fallado.

Nuevamente, haz que se sienta cómoda estando en solitario contigo. Tienes que hacerle pensar que es la mujer más preciosa que nunca hayas visto. Desarma sus barreras acariciando su piel, tocando su cabello y besándola. En el momento en que baje la guardia, se le quitará la ropa. ¿Existe verdaderamente la ninfomanía? El DSMIV o bien Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, de la Asociación Americana de Siquiatría de los U.S.A. no contiene ninguna categoría que se refiera a la adicción al sexo. Los que proponen incluir las adicciones sexuales dicen que se trata de un comportamiento que puede administrar placer y aliviar sentimientos de dolor y sus peculiaridades son un fallo en el control del comportamiento que tiene continuidad a pesar de ser destructivo para el sujeto. Se va a incluir en el DSMV.

Cuando esté caliente y mojada, colóquela en un pasillo oscuro o en un dormitorio que no esté en uso y bríndele un clímax doble: introdúzcala por detrás y presione el botón de encendido. Apunta a clímax con perfección acompasados juntos! Si practicas con tu compañero, puedes apretar contra su dedo o pene a fin de que pueda decirte lo fuerte que está. A lo largo del coito, los dos podéis apretar el músculo PC de forma alternativa. Cuando contraigas el tuyo, ejercitarás presión sobre su pene, aumentando de esta manera las sensaciones para ambos. Cuando él apriete el suyo, elevará el pene cara su vientre, pudiendo estimularte el punto G. Otra práctica muy agradable es la de relajar el músculo ordenador mientras os movéis al mismo ritmo y apretarlo en el momento en que os apartáis. Esto hará aumentar la sensación de succión durante el coito y puede resultar muy excitante para ambos.

Un cuerpo en una mujer ardiente que te va a llenar de placer

Si va a retornar a su hogar de la infancia para una visita, halle la manera de colarse en algo de sexo. La idea de tener relaciones íntimas en el dormitorio de su infancia es emocionante para ciertas personas, horrible para otras. Si es un turno para ti, halla una forma de escapar de los padres y obtener algo de privacidad. Puedes fingir que eres un adolescente otra vez y te escabullirte para una sesión de recuperación prohibida mientras esperas que tus progenitores no entren. El punto 36 del estómago se encuentra en la superior de la tibia, en la cuna donde el hueso se hace más ancho al llegar a la rodilla. Para encontrarlo, sube con el pulgar por la exterior del hueso hasta notar la curva. Entonces presiona con bastante profundidad y pregunta a tu pareja qué nota. Si estás presionando en exactamente el mismo punto, se generará una fuerte sensación, que baja por el meridiano hasta el tobillo. Una vez localizado, baja la mano de soporte y presiona con el pulgar. Cuando sientas que surge ese momento de indecisión, irradia y proyecta tu alma cara el cosmos. Decreta lo que verdaderamente quieres y mereces. Observa con tu mente lo que está ocurriendo, tu paciencia y sabiduría te van a hacer entender el verdadero camino. En la actualidad, los polinesios tienen una reputación de ser más lentos y abatidos en sus encuentros sexuales y relaciones sexuales. No se apresuran hacia el clímax. En verdad, es más probable que lo posterguen para disfrutar de todos los sentimientos y sensaciones agradables en sus cuerpos, incluido el amor que sienten por su pareja. En Slow Love: A Polynesian Pillow Book, James N. Powell elabora sobre esta forma deliciosamente lenta y sensual de hacer el amor.